Sean felices, pero construyendo el bien. Amen sin límite, pero de forma ordenada. Respeten y quieran a sus parejas, buscando su bienestar más que el suyo propio. Ríanse a carcajadas, pero a la vez dedíquense al prójimo. Estudien mucho, pero no por obligación, sino por el placer de aprender. Sean valientes, pero no temerarios. Y en fin, disfruten la vida con alegría, pero también cumplan con la vocación que Dios ha puesto en su corazón. Alejandro Peña Esclusa.
Tenia yo 19 años cuando escribí una correo comunicándole a Don Alejandro Peña Esclusa, mi interés por sus propuestas políticas y mi disposición de colaborar con él en lo que me fuera posible, curiosamente recibí respuesta y hasta una invitación para encontrarnos y conversar en persona y así fue, a inicios del 2006 me reuní con él en un local, donde converse un rato personalmente con él, curioso ya que esto es casi imposible de realizar con otros lideres políticos de la Venezuela actual, esto fue para mi una muestra de humildad, valor perdido entre los políticos nacionales, luego de esto, envuelto en mis propios proyectos políticos, no volví a tomar contacto.
La primera vez que leí sobre Alejandro Peña Esclusa fue un articulo lleno de ridículas afirmaciones, que lo convertían en una especie de monstruoso criminal “anti-democrático” miembro en su juventud de una “peligrosa secta” llamada TFP (Tradición Familia y Propiedad) y por supuesto toda esta sarta de patrañas solo me despertaron admiración, quien podría ser este personaje, a quien solo se le atacaba con ridículas afirmaciones, nada serio, nada documentado, ninguna falta clara que achacarle o una conducta ética y moral reprochable, nada de eso aparecía, solo ridículas calumnias, esparcidas por medios afines al gobierno y repetidas por miembros de la “oposición domesticada”.
Así leí el panfleto escrito por él, titulado 350 y comprendí el pánico que le tenia el gobierno y la oposición domesticada, allí se esbozan conceptos ideológicos de forma clara y precisa, además se propone una salida a la crisis generada por el castro-comunismo, basada en la realidad y no en utopismos, así comprendí que ya desde 1994 Alejandro denunciaba el proyecto totalitario de Hugo Chávez, denunciaba al Foro de Sao Paulo, la alianza con las FARC y con Fidel Castro.
Lo más preocupante para la oposición domesticada y el castro-comunismo era que Alejandro Peña Esclusa tiene una fuerte base intelectual, una ideología clara y que se reafirma con el tiempo, no hace lo que la oposición domesticada, esa compuesta por todos los lideres títeres de la tiranía castro-comunista, que solo denuncian las malas formas del gobierno, no, Alejandro siempre denuncio el fondo del proyecto, el fondo ideológico, el proyecto final, las raíces donde se forma y sus planes futuros, siempre con la visión de un estadista previno lo que el gobierno planeaba y lo denuncio a tiempo, pero silenciado por las complicidades y censurado por los medios, su voz se vio reducida del gran publico, pero censurado, prohibido y perseguido siguió trabajando, cada día haciendo que su siembra diera frutos.
Lo que me llevo a contactarlo fue que Don Alejandro propone un proyecto ideológico totalmente opuesto al gobierno, no solo un simple plan pragmático, si no un proyecto de construcción a futuro, hoy por sus ideas Don Alejandro Peña Esclusa es encarcelado, basándose en calumnias con una falsa y ridícula acusación, un delito tan fantasioso que otra vez solo provoca la risa.
Hoy Don Alejandro Peña Esclusa recoge los frutos de su lucha, el miedo de los cobardes los llevo a cometer el error de encarcelarle, creyendo que los valientes se doblegan ante los estériles ataques físicos, pero todo lo contrario, frente a eso el espíritu se ve engrandecido y la felicidad colma plenamente al que tratan de someter, pues su lucha se reafirma en el sacrificio.
Don Alejandro Peña Esclusa fue y hoy más que nunca es un ejemplo de valor y dignidad, ejemplo que se reafirma en un país sometido por la mediocridad y la cobardía, la oposición domesticada guarda silencio frente a su encarcelamiento, el castrocomunismo busca las maneras de silenciarlo, pero frente a todo esto en cada carta escrita desde la prisión, en cada palabra que expresa desde la oscuridad de las mazmorras, reafirma su fuerza espiritual y nos hace comprender que la alegría colma su ser al servir de ejemplo a las juventudes venezolanas, que como yo, creemos también que la felicidad se alcanza persiguiendo fines trascendentales.
Gracias Don Alejandro Peña Esclusa, por demostrar que todavía queda valor en la sangre de los venezolanos, gracias por sacrificarse en nombre de la patria, pues hoy usted esta en prisión por defender el futuro nuestro, el futuro de los jóvenes, usted esta en prisión por el miedo del tirano y la complicidad de los cobardes, pero aunque físicamente este solo en la oscuridad de una mazmorra, espiritualmente esta en cada joven que lucha por el futuro de la patria.
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